El Tribunal considera que el atentado ha causado daños al marco del siglo XVIII y su restauración asciende de 2.000 libras. No se especifican los costes administrativos complementarios como la peritación, traslado y seguro, sí se ha realizado fuera del museo.
REDACCIÓN. Según informa la BBC, los dos agitadores de la banda Just Stop Oil, han sido condenados por el Tribunal de Westminster (Reino Unido) por los daños causados en el marco de la pintura “Los melocotoneros en Flor” de Vincent Van Gogh, el pasado 30 de junio en la Courtauld Gallery de Londres.
Louis McKechnie, de 22 años y Emily Brocklebank, de 23, son los integrantes de Just, Stop Oil , organización que perpetró el pasado 30 de junio este ataque, iniciando los atentados contra obras de arte y que se han continuando por otros grupos afines en diferentes museos del mundo.
McKechnie ha sido condenado finalmente a 21 días de prisión aunque inicialmente se solicitaba una pena de 6 meses. Brocklebank fue condenada a llevar una tobillera electrónica para controlar su movimientos durante 6 semanas. Un tercer miembro presuntamente involucrado, Xavier Gonzales-Trimmer de 21 años, se enfrentaba a cargos por distraer a los guardias, pero finalmente estos cargos fueron retirados. Gonzales-Trimmer fue multado por no presentarse ante el tribunal para la vista preliminar.
La jueza del caso Neeta Minhas destacó en la sentencia el valor considerable de la pintura y agregó que el daño causado al marco “no fue menor, insignificante, temporal o trivial, sino permanente. No está en un estado en el que pueda volver a su estado original”. Esta consideración se ajustaría a la que recientemente alegaban tanto el abogado penalista José Mª Garzón, como el abogado Javier Gallego, como ya se publicó en Pecados del Arte.
La defensa de los acusados argumentó que el cuadro podría beneficiarse de una revalorización en los próximos años gracias a la publicidad obtenida por el atentado. La abogada tampoco dudó en comparar esta actuación con las protagonizadas por Martin Luther King.
Sobre la cuestión de la probable revalorización se solicitó la opinión de una experta, concretamente a una de las conservadoras del museo, Karen Serres. Fue muy clara: "Absolutamente no”, además de que no creía que la pintura fuera a venderse de todos modos.
Este juicio continuaría con las actuaciones legales que se están aplicando a este tipo de agresiones contra el patrimonio artístico como ya sucedió en Holanda a principios de mes, cuando un tribunal condenaba a dos meses de cárcel por destrucción y violencia abierta contra la pintura a dos miembros de la misma organización, que atacaron al cuadro “La joven de la perla” de Johannes Vermeer en un museo de La Haya.
Otros museos también han presentado denuncias como la Colección de Arte Estatal de Dresde contra los agresores de Letze Generation por pegarse al marco de la “Virgen Sixtina” de Rafael. En este caso, la restauración se estima en 5.000 € más 7.000 € por lucro cesante por el cierre temporal del museo.
A partir de esta sentencia el parlamentario conservador Gareth Johnson sugirió en la Cámara de los Comunes que Just Stop Oil, debería considerarse como “organización proscrita para que puedan ser tratados como la organización criminal que realmente son”.
El primer ministro británico Rishi Sunak por su parte, anunció que se está preparando un Proyecto de Ley de Orden Público que introducirá un nuevo delito que “criminaliza la táctica de protesta de adherirse a otros, objetos o edificios para causar una interrupción grave" y por la que los infractores se podrían enfrentar a multa, hasta seis meses de prisión o ambas.
Just Stop Oil, es una facción integrante del grupo RedA22 financiada por Climate Emergy Fund.