La Secretaría de Cultura de Méjico a través de su campaña en redes #MiPatrimonioNoSeVende está sido muy activa en la repatriación de objetos culturales y ya se han ejecutado varias solicitudes de restitución
REDACCIÓN El pasado 23 de marzo La Secretaría de Cultura y el INAH de Méjico emitía un comunicado exigiendo a la sala de subastas francesa MILLON, la cancelación de una subasta prevista para el 3 de abril, en la que saldrán a la venta 148 lotes de arte precolombino.
Según este comunicado 83 de los 148 objetos en venta, están protegidos por las leyes de patrimonio cultural del país.
La sala MILLON por su parte, acaba de comunicar que planea seguir adelante con la venta, y agregó que las solicitudes de restitución del estado mexicano, recordando que estas reclamaciones “a menudo no tienen éxito porque se basan en hechos infundados”.
Para ello la sala justifica que “todos los lotes tienen un origen irreprochable y responden perfectamente a los criterios fijados por la convención de la UNESCO ratificada por México y Francia”
“ El arte precolombino es un faro cultural mundial”, añadió el propietario de la sala Alexandre Millon . “Su influencia nunca debe verse obstaculizada por el oscurantismo político” calificando este intento de reclamación como “Oportunismo populista” agregando que “revisitar el pasado y la historia para recuperarlos con el pretexto del arte es una tontería cultural”.
La Secretaría de Cultura del Gobierno de Méjico y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), presentó una denuncia oficial contra Millon y se enviaron cartas a la Asesoría Jurídica de la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Director General de Asuntos Policiales Internacionales, y la Interpol en un intento de repatriar las obras en cuestión.
La Secretaría de Cultura de Méjico a través de su campaña en redes #MiPatrimonioNoSeVende está sido muy activa en la repatriación de objetos culturales y ya se han ejecutado varias solicitudes de restitución
A principios de este mes, el ministerio hizo un llamamiento a más de 100 galerías y casas de subastas en toda Europa para detener la venta de bienes culturales de origen mejicano.