De momento, más de 40 objetos robados de Italia, Grecia y Turquía vendidos o cedidos a museos y colecciones han sido identificados por ARCA como procedentes de Michael L. Ward
REDACCIÓN. El anticuario Michael L. Ward, propietario de Ward &Co. en Nueva York ha sido identificado y denunciado por la fiscalía de este estado como traficante de objetos culturales robados.
La fiscalía ha podido determinar la trazabilidad de las transacciones de más de 40 piezas robadas en Italia, Grecia y Turquía gestionadas por Ward , después de que ARCA (Asociación para la Investigación de Crímenes Contra el Arte) señalara claramente en su blog el pasado 12 de octubre identificase esas piezas y a Ward como proveedor de las mismas.
Se da la circunstancia que Ward fue designado anteriormente por el entonces presidente George HW Bush en 1992 para formar parte del Comité Asesor de Bienes Culturales de los Estados Unidos, el organismo estatutario estadounidense responsable de la implementación nacional de la Convención de la UNESCO sobre los Medios para Prohibir e Prevenir la Importación, Exportación y Transferencia de Propiedad Ilícitas de Bienes Culturales de 1970.
No obstante, poco después del nombramiento, Ward ya fue objeto de investigación por su intento de vender 50 piezas de importantes joyas micénicas, conocidas como el Tesoro de Aidonia.(XV a. C) y que había sido expoliadas en 1978 de un cementerio micénico en Aidonia, cerca de Nemea, en el sur de Grecia. Ward pudo evadir el proceso penal gracias a un acuerdo extrajudicial en 1993 por el cual Grecia acordó retirar su demanda a cambio de su donación de las joyas a la Sociedad para la Preservación del Patrimonio Griego en Washington.
La investigación fiscal que realizó el FBI y el HSI en colaboración con la policía alemana desentrañaron una trama de blanqueo de capitales que vinculaba a Ward con otro traficante de antigüedades búlgaro llamado Eugene Alexander alias Evgeni Svetoslavov Mutafchiev,también investigado por la fiscalía de Nueva York.
El tal Alexander desde 1999 hasta 2022, dirigió un una red de blanqueamiento de capitales mediante la venta de antigüedades expoliadas a coleccionistas europeos y estadounidenses, incluidos Michael Steinhardt, Richard Beale de Roma Numismatics y Erdal Dere de Fortuna Galleries, entre otros.
Como parte del plan de lavado de dinero, Ward recibió más de 100 antigüedades de Alexander entre 2015 y 2019. Al menos 80 de ellas eran antigüedades saqueadas enviadas a la galería de Ward en Nueva York.
En febrero de 2022, las autoridades alemanas registraron el apartamento de Alexander, lo que incluyó la investigación de sus ordenadores donde hallaron fotografias que los expoliadores habían enviado a Alexander de muchas piezas en las parecían recién excavadas y aún no habían sido limpiados ni restauradas como prueba de autenticidad. Alexander organizó su restauración y una vez limpiadas y las envió a Ward.
Ward se ha comprometido a declararse culpable, si logra únicamente una sentencia de libertad condicional por un período de un año y la inmunidad procesal en Italia. Este acuerdo también le compromete a entregar antigüedades adicionales, identificar en su poder objetos vendidos, consignados o poseídos anteriormente por Eugene Alexander”.
Ward también ayudará a Italia y Alemania en la investigación y el procesamiento de Alexander.
Michael Ward ha confesado en su declaración de culpabilidad:
“Comencé a hacer negocios con Eugene Alexander a fines de la década de 1990, y desde entonces he comprado o recibido en consignación muchas antigüedades que valen millones de dólares a través de Ward and Co... En las reuniones que mi abogado y yo hemos tenido con el fiscal durante los últimos meses, me he convencido de que el Sr. Alexander estaba comerciando con antigüedades que habían sido retiradas ilegalmente de sus países y que me habían proporcionado procedencias de antigüedades que no eran exactas. La fiscalía también me informó que el Sr. Alexander estaba involucrado en lavado de dinero. De 2017 a 2019, el Sr. Alexander me pidió que firmara ciertos documentos, los cuales firmé y entregué. Esos documentos contenían información que no era exacta”.
NOTA.-
El acuerdo al que ha llegado Michael Ward con la fiscalía de Nueva York debe ir en serio, ya que Pecados del Arte, no ha sido capaz de encontrar ninguna imagen ni de Michael Ward, de su galería ni de Eugene Alexander. Ha desaparecido de la red cualquier imagen que pueda identificar al traficante arrepentido. Una lástima no poder identificar al individuo.