Las vidrieras de Notre-Dame no se vieron afectadas por el incendio de 2019
REDACCIÓN. Según Informa la revista LA TRIBUNE DE L’ ART, el presidente de Francia, Emmanuel Macron y el arzobispo de Paris, Monseñor Ulrich, continúan con su proyecto personalista en restauración de la catedral de Notre-Dame de París después del incendio que la arrasó en 2019.
Entre las nuevas medidas dictadas por Macron de acuerdo con Mons. Ulrich esta la sustitución de las vidrieras de Violet-Le-Luc originales por otras contemporáneas. Esta sustitución se consideraría una “vandalización del patrimonio” según los expertos y la misma revista que ha lanzado una campaña de firmas que ya ha alcanzado las 120.000 después de conocerse el capricho presidencial.
Esta vidrieras no fueron afectadas por las llamas, más allá de su suciedad por el humo y están en perfecto estado.
Los más de 3.000m2 de vidrieras aportan a la catedral la luminosidad característica del templo, especialmente las diseñadas por Violet-Le-Luc en 1844 para las para las capillas laterales y las de la girola, destruidas durante la Revolución Francesa.
Entre los proyectos de restauración, también se platea la construcción de un museo que acoja las piezas más grandes rescatadas del incendio. En este museo se “encajarían” las vidrieras históricas de Le Luc y de May.
Expertos y arquitectos opinan que esta decisión presidencialista es totalmente contraria a la ley de patrimonio francesa, protegidas como monumento histórico y sustituirlas por vidrieras figurativas contemporáneas constituiría, por tanto, una profunda alteración de la obra de Viollet-le-Duc, La eliminación de estas vidrieras, perjudicaría el equilibrio luminoso y la integridad del estado histórico de la catedral, deberían conservarse allí, sobre todo porque ya han sido limpiadas y consolidadas durante la restauración de estas capillas, según indica la petición de firmas.
La restauración Notre Dame no ha estado exenta de polémicas. La Primera, se refiere a la absurda polémica sobre el plomo, empleado en las vidrieras y tejado, lanzada por la ex vicealcaldesa de París encargada de la salud, Anne Souyris.
Otra polémica fue la creación del Museo de la Obra para albergar diferentes tesoros y las obras de la catedral, algunas de las cuales son muy grandes, como las Mays que aún quedan en las reservas de algunos museos (en particular el Louvre y Arras) o la alfombra del coro de la catedral.
Este espacio inicialmente diseñado para explicar “el antes y después” del incendio, y su proceso de restauración, es para los expertos provisional y los expertos consideran que este museo debería plantearse por su contenido siguiendo el modelo del Museo de la Ópera del Duomo en Florencia.