El Consejo Valenciano de Cultura (CVC) en su informe refleja en su informe, observa en la sentencia del Tribunal Supremo de 2021 sobre los bienes del Monasterio de Sijena un precedente favorable para este caso
REDACCIÓN. Según informa el DEBATE, el Gobierno valenciano ha reactivado una histórica reclamación para recuperar el 'Llibre dels Repartiments dels terres entre vehins de la molt Noble y Leal e Insigne Ciutat de Oriola” del siglo XIII y que actualmente se halla en la Biblioteca Nacional de Catalunya.
Redactado entre los siglos XIII y XVII, este códice medieval representa el único documento que da cuenta de la repartición de tierras en Orihuela y la Vega Baja del Segura después de la reconquista de 1243. Consta de 87 folios escritos en letra gótica, incluyendo inscripciones en castellano y valenciano, lo que lo convierte en una fuente fundamental para el estudio de la población medieval en esta región. La relevancia de este códice se encuentra en la información que proporciona sobre la onomástica y la toponimia local, además de su valor histórico como símbolo para Orihuela.
Entre 1907 y 1908, el Archivo Municipal de Orihuela sufrió el robo de un libro que, posteriormente, en 1921, del librero barcelonés Salvador Babra lo vendió a la Diputación de Barcelona. Desde ese momento, el manuscrito ha estado guardado en el Instituto de Estudios Catalanes, hoy Biblioteca Nacional de Cataluña.
Entre 1931 y 2018, la ciudad de Valencia ha formalizado cinco solicitudes para recuperar lo que le pertenece. A pesar de estos esfuerzos anteriores, un acuerdo definitivo con Cataluña nunca se ha concretado. En el año 2007, se consideró la posibilidad de un convenio para la cesión indefinida del libro, pero al final, la devolución no se llevó a cabo.
Carlos Mazón, presidente de la Generalitat Valenciana, ha descrito el caso como «una reivindicación histórica» y ha subrayado que «esta pieza esencial de nuestra historia, que tan íntimamente está relacionada con este juzgado privativo, debe volver a Orihuela, a su casa». En sus declaraciones, Mazón sostiene que el manuscrito fue “sustraído” y que su posterior venta se realizó «pese a su adquisición ilícita», lo que implicaria receptación. Además, aseguró que el Ayuntamiento de Orihuela dispone de «todos los recursos jurídicos y políticos de la Generalitat Valenciana» para lograr la recuperación del documento «robado».
En 2021, el informe favorable a la devolución del manuscrito fue emitido por el Consejo Valenciano de Cultura (CVC), respaldando así la solicitud presentada por el Ayuntamiento de Orihuela. En este documento, se subraya que el códice posee un gran valor histórico y documental, siendo fundamental para la identidad cultural de la región. Asimismo, el CVC sugiere que las instituciones públicas implicadas lleven a cabo negociaciones coordinadas para su reposición. En este contexto, se enfatiza que el manuscrito fue objeto de robo y adquirido de manera irregular, lo que convierte su restitución en una cuestión de justicia histórica.
En su informe, el organismo valenciano señala que considera un precedente favorable la sentencia del Tribunal Supremo de 2021 relacionada con los bienes del Monasterio de Sijena. En esa ocasión, la Justicia dictó la orden de devolver obras de arte que habían sido adquiridas por la Generalitat de Cataluña, al determinar que dicha compra no era legítima.