El Plan PAS (Portable Antiques Program) incentiva la recolección de hallazgos locales realizados por buscadores de metales en Inglaterra para su catalogación, valoración y premia a los descubridores.
Según informa el Daily Mail, a finales de octubre pasado fueron robadas 28 monedas romanas y un pequeño lingote de plata del mismo origen, en las dependencias locales del PAS del British Museum en Lancashire (Museo Preston).
El Plan PAS (Portable Antiques Program) es un programa nacional de sensibilización para la recuperación de pequeños hallazgos arqueológicos en Inglaterra que se suceden desde 2003 con la proliferación de busca tesoros locales mediante detectores de metales.
Para este programa, el British Museum cuenta con 40 oficinas locales que recogen los restos hallados y se trasladan a la sede central del museo donde se analizan y valoran. Los objetos hallados son considerado por ley como “tesoros” y propiedad de la Corona . Se retienen para determinar si son de importancia nacional, en cuyo caso los museos y las instituciones públicas tienen la oportunidad de comprarlos. Sin embargo, en la mayoría de los casos, los hallazgos se rechazan y se devuelven al remitente.
Una característica fundamental del PAS es que una vez tasados y si la pieza es importante y el museo desea quedársela, el museo reparte al 50% el valor de la pieza encontrada con el busca tesoros, de esta manera se incentiva la recuperación de los hallazgos.
Gracias a este programa y según la última información del año 2021 del Plan PAS, un tercio de los hallazgos se han comunicado oficialmente. Sin duda un éxito.
En este caso el robo ascendería a miles de libras. Los objetos debían estra custodiados en una instalación segura del edificio administrado por el consejo del condado de Lancashire antes de enviarse al Museo Británico para su evaluación y valoración. Sin embargo, cuando el Museo Británico solicitó que se transfiriera, el personal del museo descubrió que faltaban.
Una auditoría urgente realizada con el Museo Británico determinado que se han perdido hasta 12 conjuntos y sus archivos en casos similares en otros lugares del Reino Unido.
Andy Brockman, un escritor especializado en investigar delitos patrimoniales afirma: "Si los objetos perdidos no se recuperan, la pérdida es tanto para el patrimonio nacional que pertenece a todos, y específicamente para el buscadores y terratenientes, quienes, por ley, dividirían cualquier recompensa por declarar el tesoro al 50%, lo que resulta un verdadero incentivo para ellos.
"La desaparición sospechosa de objetos también podría tener consecuencias preocupantes para la legitimidad del Programa de Antigüedades Portátiles del Museo Británico y el proceso del Gobierno para administrar los hallazgos de tesoros de manera justa”.
La policía todavía está investigando el presunto robo en este momento.
El agente de la policía, Alister Clustyery declaraba: "Los restos arqueológicos desaparecieron de un almacén seguro y dentro de una oficina cerrada, en un edificio al que el público no tiene acceso rutinario, auque tampoco parece haber habido un sistema de inventario en el servicio del museo de Lancashire que permita al personal controlar, sí los objetos que se habían registrado todavía estaban almacenados”.
Estas reflexiones podrían afectar seriamente la confianza en el Plan PAS que es el único organismo nacional que actúa como punto de contacto entre los miembros del público que hacen un hallazgo y los arqueólogos.