El informe publicado (en inglés) por la FATF (Financial Action Task Force) se ha actualizado con las nuevas normativas internacionales, no obstante presenta la cuestión de manera demasiado genérica y ha planteado diversas controversias por parte de la industria y mercado.
REDACCIÓN. El Grupo de Acción Financiera Internacional (FATF) por sus siglas en inglés, acaba de publicar su informe "Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo en el Mercado de Arte y Antigüedades".
El informe de 60 páginas presenta a grandes rasgos cuestiones como: Los aspectos vulnerables del mercado del arte, de los objetos y de los agentes del mercado. También analiza las probables amenazas y procedimiento de blanqueo de capitales a través de objetos artísticos y culturales. Presta especial atención a la financiación terrorista mediante objetos artísticos y su relación con estructuras criminales internacionales en cuanto a su contrabando y mercadeo. Cuestiones que Pecados del Arte ya aproxima a sus lectores periódicamente
Lo más novedoso del informe serían las cuestiones relacionadas con la venta por Internet y nuevos productos como las NFT, también presentadas de manera muy genérica incluso vaga, de manera que podría tratarse de un informe de hace 5 o 6 años, perdiendo la oportunidad de profundizar de manera más concreta para colectivos profesionales potencialmente como sería los criminólogos.
Han participado 27 países , pero curiosamente no España, a pesar de que se mencionan como operaciones de referencia y éxito la OPERACIÓN PANDORA VI (2018) coordinada por la Guardia Civil contra el tráfico ilícito o la de Policía Nacional en 2016, contra las redes de financiación del terrorismo islámico mediante el expolio, tráfico ilícito y blanqueo de restos arqueológicos procedentes de Oriente Medio.
Un informe que debería resultar un recordatorio permanente sobre estas cuestiones, pero que fundamentalmente ha levantado ampollas entre la industria y mercados del arte que se han quejado en varios medios internacionales que FATF ha lanzado la piedra y escondido la mano al no ser más concisos y casi denunciar al sector como culpable de todos los males, pero con pocas pruebas, como indica el abogado experto Nicholas O'Donnell, socio del bufete de abogados Sullivan & Worcester.
El informe señala que "los estudios de casos y las discusiones operativas identificaron que la falta de priorización entre las fuerzas del orden en la investigación [del lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo] relacionada con los objetos culturales es el principal desafío de investigación".
Rena Neville, de ALD, Corinth Consulting, ha añadido: "El informe es muy amplio y probablemente ayudará a los gobiernos que buscan regular el mercado, pero podría ser más productivo si el informe tratara por separado los malos actores intencionales que participan en el comercio frente a la gran mayoría que son partes utilizadas por malos actores".
FATF es un organismo de control mundial contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo. Este organismo intergubernamental establece estándares internacionales que tienen como objetivo prevenir estas actividades ilegales y el daño que causan a la sociedad y trabaja para generar la voluntad política necesaria para llevar a cabo reformas legislativas y reglamentarias nacionales en estas áreas.
FATF cuenta con 39 miembros y establece estándares internacionales para garantizar que las autoridades nacionales puedan perseguir de manera efectiva los fondos ilícitos vinculados al tráfico de drogas, el tráfico ilícito de armas, el fraude cibernético y otros delitos graves. En total, más de 200 países se han comprometido a implementar los estándares del FATF como parte de una respuesta global coordinada para prevenir el crimen organizado, la corrupción y el terrorismo.
El FATF se estableció en 1989 y tiene su sede en París.