REDACCIÓN. Según el reporte de TODAY IT, 21 obras fraudulentas atribuidas a Salvador Dalí fueron incautadas por agentes de los Carabineros (TPC) en la exposición “Salvador Dali, entre el arte y el mito”, que se inauguró el 27 de septiembre en el Palacio Tarasconi de Parma. La intervención fue ordenada por jueces de la Fiscalía de Roma.
En la lista de las 21 obras incautadas se encuentran tapices, dibujos, grabados y diversos objetos como cerámicas, frascos de perfume, libros y fotografías. Estas piezas provienen de colecciones privadas de Bélgica e Italia y han sido erróneamente atribuidas a Dalí.
A raíz de varios informes de la Fundación Gala-Salvador Dalí, que se encarga de la gestión y defensa de la propiedad intelectual del artista español, surgieron inquietudes sobre la autenticidad de algunas obras. La investigación, coordinada por la Fiscalía de Roma, se inició gracias a estos informes.
La disposición a colaborar con los investigadores y la sorpresa fueron expresadas por los organizadores de la exposición. En Parma, donde se lleva a cabo la muestra, Navigare está a cargo de su gestión y, en un comunicado firmado por sus representantes legales, afirmó estar "dispuesta a ofrecer plena cooperación a las fuerzas del orden para verificar la autenticidad" de las obras incautadas. La empresa organizadora se muestra dispuesta a ofrecer a los Carabineros "la documentación solicitada para la investigación, así como cualquier otra información útil".
La intervención de las asociaciones de consumidores en el asunto ha sido notable. CODACONS explica: "Si se descubren las actividades ilegales y la justicia confirma la posible falsedad de las obras expuestas, se trataría de un incumplimiento del contrato que abriría la puerta a reembolsos para todos los ciudadanos que adquirieron entradas para la exposición". Además, han anunciado su intención de actuar como parte perjudicada en el eventual juicio.
Por supuesto sobrevuela la sospecha ¿las obras fueron falsificadas directamente por quienes las pusieron en circulación, o si quienes las pusieron en circulación las compraron a terceros?. Devolver unas obras blanqueadas en una exposición de prestigio es una oportunidad dorada para el falsificacor y el estafador