REDACCIÓN. Según informa el diario THE HINDU, la unidad policial hindú conocida como IDOL WING CID (IW-CD) especializada en antigüedades religiosas, ha intervenido siete ídolos religiosos en un registro realizado en el domicilio de una coleccionista del estado de Chennai al este de la India.
La policía sospechó cuando la coleccionista de arte, una tal sra. Shobha Durairajan se personó en el Servicio Arqueológico de la India (SAI) para registrar legalmente tres piezas compradas en la Galería Aparna.
En una primera inspección los investigadores advirtieron que en la base de las peanas de los tres ídolos estaba inscrito “Templo Adhi Kesava” y que coincidía con tres piezas robadas en este templo en julio de 2011. En ese momento, se presentó la denuncia ante la policía local en Ulundurpet, que no pudo avanzar en la investigación y cerró el caso en 2013. Se trata de tres ídolos de fundición de las deidades Perumal (avatar de Visnú), Sree Devi (esposa de Visnú) y Bhudevi (la tierra), tres entre las 1.160 deidaes indúes.
Ya en casa de la coleccionista, los investigadores encontraron otras cuatro estatuillas más, compradas por esta coleccionista entre 2008 y 2015 que correponderían a los dioses Amán (Esposa de Shiva), Virabhadra (variante de Shiva en chungo) y Mahadevi ( Madre del Universo) y Asthira (¿?).
Cuando la propietaria aportó los documentos de propiedad de éstos últimos, la policía reconoció que estaban firmados y certificados por un conocido contrabandista y tratante de este tipo de objetos. Un tal Deenadaylan.
El caso se ha reabierto para descubrir de donde proceden los otro cuatro ídolos hallados en casa de la sra. Durairajan.
El Director General de la Unidad IW-CID, K. J. Murali dijo que la investigación reveló la participación de Deenadayalan (ya fallecido) en este caso y que la compradora, la Sra. Durairajan, será acusada como culpable de posesión de ídolos antiguos robados en templos.
Las deidades Adhi Kesava Perumal, Sree Devi y Bhoodevi, serán devueltas después de diez años a sus templos de origen.
Esta es la primera vez que unidad Idol Wing restituye ídolos robados de un templo después de recuperarlos. Lejos de ser una anécdota colorista, significa que por parte de estos países existe una preocupación por preservar su patromonio artististico cultural y evitar el contrabando hacia otros mercados, a partir de coleccionistas loclales.