Lo advertíamos hace unos días y lo que parecía una cosa se va a convertir en lo que que llamamos “Serpiente de Verano” y me temo que después se convertirá en un Sindios, gracias a las ocurrencias de nuestro Terrible Enfant de la Cultura y el Patrimonio.
Era de esperar que los de Sijena, puestos a pedir se hubieran envalentonado con la decisión judicial, pero pillar a un perito (no sabemos que especialidad tiene en arte, o si siquiera, es perito en arte) y se pongan a reclamar la tabla al Prado es ir a por Caza Mayor.
Resulta que la la pieza reclamada en cuestión , una Natividad renacentista del siglo XVI, salió de Sijena en los años 20 de la manera tradicional, es decir que las monjitas o el arzobispo la vendieran a algún traficante del momento.. El perito en cuestión del que hablaba, dice que la pintura llegó al Prado en 1923 , pero el historiador del arte y experto en arte medieval Albert Velasco dice que se vendió en subasta en Londres en 1926.
La cosa es muy sencilla. Averiguar que casa de subastas y consultar sus archivos. Los ingleses lo conservan todo. Sé de que hablo, porque así localicé un cuadro de Goya presuntamente expoliado por los franceses , pero que en realidad fue vendida por el taramabana de Javier Goya Bayeu al embajador de Inglaterra en 1834. Dicen que además subastas Alcalá vendió la Natividad de Sijena al Estado en 2003 por 90.000€. !Pues coño!, que le pregunten a la sala como les llegó y los papeles que tenía y de paso averiguaremos como funcionan las subastas en España.
Que las monjitas o el arzobispo vendieran la pintura es más que probable, y llorar por la leche derramada es algo que ya cabrea.
La suerte, es que la fachoesfera con el museo del Prado no se atreve. Una cosa es tocar los cojones al Museu Nacional d’ Art de Catalunya y darle bola al asunto, pero con el Gran Mastodonte (el Prado) no se atreven.
Los más radicales (ANC y ERC) ya han pedido la dimisión de la Consellera de Cultura y eso a la derecha le pone. Tardaremos poco en ver a Vito Quilez paseándose por delante del Palau Marc en las Ramblas, y al Ébole preguntando mamarrachadas en los bares cercanos al Museo de Lérida.
Decíamos hace unos días que ya tenemos nuestro propio sainete de las pinturas de Sijena como el British tiene lo suyo con los Mármoles del Partenón.
Las obras de arte de la Iglesia son del pueblo español, no lo olvidemos. Mientras no salgan de España, como pasó en el siglo XX, no debería importar demasiado en que museo estén. Darle el tinte político es ponerse a la altura del betún.
Si se vendieron y compraron posteriormente en buena fe, una solución para Sijena sería una reproducción de calidad , explicando eso si, quien la vendió, a quien, por cuanto y como se lo llevo crudo. porque ya les digo que del Prado no saldrán
Otra solución y tratándose de pinturas y murales de la iglesia, es que en Sijena se organice una convocatoria popular para que se presentes propuestas. Ya saben: Los Ecce Homo o Esperpentos habitual sobre el asunto.
Esta segunda será mucho más rentable y recibirá muchas más visitas que el MNAC. Y si no que hablen con los de Borja.