Los griegos son persistentes. Son como la carcoma. Ellos a lo suyo erre que erre. Si alguien pensaba que el asunto de los Mármoles del Partenón había quedado en Stand By, otros cien años más, lo tiene claro.
No conozco a muchos griegos , más allá de mi querido hermano Aris Lioris que era heleno de pura cepa, pero este anda en USA desde hace años, y a pesar de que casose con griega-griega (Helena) y tienen hija (Melina), creo que se han echado a perder. La niña se vestía a los 12 años de princesa Disney en vez de sacerdotisa virgen de la diosa Niké y se están dejando una pasta en la universidad de la cría, sabiendo que está condenada de por vida a ser considerada una Olive, que es como allí nos llaman a los mediterráneos.
En USA también conocí al temible Stravros, amigo de Aris, dedicado a la restauración y importación de aceitunas de Malakata, más apreciadas que el caviar y que por cierto me recuerdan nuestras Empeltre aragonesas. Conociendo a Stravos, no me extrañaría que sus aceitunas fueran originalmente aragonesas y las envasase como Malakata, como el aceite italiano que viene de Lérida.
Volviendo a los Mármoles del Parthenon, alias Elgin Marbles. Los helenos han aprendido la lección y han visto que la mejor manera de continuar con su reclamación, se basa en emplear el mismo tipo de herramientas que emplean los británicos, entre la que destaca la del Lobby: Callada, engrasada económicamente y más efectiva que una tuneladora.
Pero claro, engañar al abad es difícil ya que antes ha sido fraile, y los ingleses cuando se ponen a contra atacar lo hacen en serio. El británico para las cosas del día a día se deja caer en manos de los Laboristas, pero para las cosas del Rule Britania, meten la reductora y lo dejan en manos de los Conservadores y si son Torys, mejor, que con esto del colonialismo tienen mano dura y no se cortan ni un pelo.
La última pifia Laborista fue la de Antony Eden que les desbarató definitivamente el imperio en 1957, y eso , ni una florista de Columbia Road lo perdona, porque en las colonias era donde su hijo soldado podía prosperar y ascender y un baronet de las Midlands, podía tener criados bantús entrenando y corriendo delante de sus sabusesos de caza. Más o menos como nuestro desastre del 98.
La ex primera ministra Liz Truss (La Breve), el historiador Dr. David Starkey y Sir John Redwood se encuentran entre los 34 firmantes de una carta que alega que el Museo Británico es parte de una campaña "encubierta" y "acelerada" para devolver los mármoles de Elgin a Grecia.
El documento señala que algunos administradores del Museo Británico podrían tener que reconsiderar su postura y pide poner fin a cualquier negociación para devolver los mármoles de Elgin , también conocidos como las esculturas del Partenón, o arriesgarse a sufrir impugnaciones legales.
La carta ha sido organizada por el grupo Great British PAC, liderado por la activista conservadora Claire Bullivant y el ex vicelíder del Partido Reformista Ben Habib. Gente a la que no conozco ni creo que vayan por Mallorca.
El Great British PAC se describe a sí mismo como “una coalición de líderes empresariales, políticos, abogados, jefes de policía, periodistas, patriotas y activistas de todos los ámbitos de la vida, unidos por un amor compartido por nuestro país y un compromiso con su futuro… el Great British PAC está comprometido a salvaguardar al Reino Unido de las imprudentes propuestas políticas del Partido Laborista”, ósea agüita o be careful.
Puede que los movimientos laboristas para plantearse lo de la devolución de los frisos, no haya sido otra cosa que normalizar la situación después del movidón de 2023, aunque según cuenta el THE GUARDIAN, que son bastante progres, todo el asunto de la carta se podría clasificar como alarmista.
Lo interesante del asunto es que sea alarmismo o no, ya se está avisando a los griegos que se han equivocado de plano pensando que los Laboristas serían unos blandos, y que si hace falta o sin ella, quien de verdad maneja los hilos en los asuntos de la Gran Bretaña sigue siendo la Gran Logia Unida de Inglaterra, por si alguno pensaba que lo de la masoneria en Inglaterra sólo era una cuestión de su pasado eduardiano.
Si así fuera, cosa que no sé a ciencia cierta, porque con la masonería hemos topado, circunstancia que por otro lado no me extrañaría, más vale que los griegos se aten los machos, porque también está presente en Grecia desde el siglo XVIII y ya se sabe: Masones somos todos o entre bueyes no hay cornadas.
Que los Elgin Marbles asciendan al imaginario de la Conspiración Masónica, era algo que sinceramente no me esperaba, pero que quieran que les diga, lo de los líderes empresariales, políticos, abogados, jefes de policía, periodistas, patriotas y activistas de todos los ámbitos de la vida, han sido y son el substrato masónico en Inglaterra y el que no se haya enterado, que vaya a las carreras de Ascot o se pasee por enfrente del White Gentelmen’s Club de Londres.