Jorge Llopis. Como era de esperar (o como tenía que llegar tarde o temprano), ahora le ha llegado el turno a Alemania en el asunto de las Restituciones de bienes culturales procedentes de su pasado colonial.
En comparación con las dos grandes potencias coloniales, Francia y Reino Unido, los esfuerzos coloniales alemanes solo comenzaron a partir de 1884. Alemania reclamó las colonias que aún no se habían repartido en la división de ese continente, y logró construir en ese momento el tercer imperio colonial más grande. En términos de población, fue el cuarto imperio colonial después del holandés.
En África, Alemania tuvo colonias en Togo, Camerún, Namibia, Tanzania, Burundi y Ruanda. Estas colonias eran muy valoradas por los alemanes, ya que eran ricas en recursos naturales. Por ejemplo, Namibia era importante por su diamantes, madera y animales salvajes, mientras que Tanzania era rica en oro y diamantes. En Oceanía, Alemania tuvo colonias en Nueva Guinea y las Islas Salomón desde donde importaban maderas y aceite de coco... Escasas si las comparamos con el imperio británico y el francés, claro…
Pero donde se lleva a cabo el expolio colonial alemán, es sobretodo en Camerún. Desde 1884 utilizó medios cada vez más “expeditivos” (cuando no brutales) para suprimir la resistencia de la población local. Durante más de 30 años de dominio alemán, las tropas coloniales llevaron a cabo al menos 180 "expediciones punitivas" para asegurar la tierra, arrasando pueblos y granjas y saqueando o destruyendo el patrimonio cultural.
Alemania perdió el control de sus colonias cuando comenzó la Primera Guerra Mundial en 1914 y la mayoría de sus posesiones fueron invadidas por sus enemigos en las primeras semanas de la guerra.
La cuestión es que los museos alemanes de “culturas del mundo” (antropología, etnografía, historia, etc.) albergan 40.000 objetos de Camerún, más que toda la colección africana del Museo Británico, según un nuevo estudio presentado el jueves por la francesa Bénédicte Savoy, profesora de la Technische Universität de Berlín, y Albert Gouaffo, profesor de la Universidad de Dschang en Camerún.
El nuevo estudio, llamado Atlas der Abwesenheit (Atlas de la Ausencia), que está disponible públicamente a través de acceso abierto, es el resultado de dos años de trabajo de investigadores de Alemania y Camerún y contó con el apoyo de curadores de 45 museos alemanes.
El expolio colonial alemán en África no sólo consistió en el saqueo de objetos culturales, sino que de acuerdo con las incipientes
Mientras que las colecciones estatales de la capital de Camerún, Yaundé, comprenden sólo unos 6.000 objetos. La mayoría de los 40.000 artículos en los museos alemanes están en depósito y no en exhibición.
“Eso es mucho, Un número enorme. No hay país que tenga más objetos pertenecientes al patrimonio camerunés y desde luego no es Camerún…” Reconoce la profesora Savoy, directora del citado informe “Los objetos en los museos alemanes incluyen textiles, instrumentos musicales, máscaras rituales, tesoros reales como taburetes y tronos, manuscritos, armas y herramientas, ninguno de los cuales fue concebido como objetos de exhibición para vitrinas”, declara la experta francesa.
Los museos alemanes con las mayores existencias de objetos cameruneses incluyen el Museo Linden con más de 8.000 piezas y el Museo Etnológico de Berlín y el Museo Grassi en Leipzig, cada uno con más de 5.000 objetos.
El gobierno de Camerún ha creado una comisión de restitución con representantes de los ministerios de Exteriores, Educación y Cultura, los gobernantes reales tradicionales y la sociedad civil, y en Berlín ya se están organizado foros y mesas de debate sobre esta cuestión, para presentar el estudio mencionado.
Los diplomáticos de Camerún dicen que la restitución está en su agenda. La agregada cultural de Camerún en Alemania Maryse Nsangou argumentó en este sentido: “Alemania está llena, Camerún está vacío. Debemos recuperar estos objetos. Los necesitamos para construir el futuro. La restitución el objetivo al que nos dirigimos”. Se ha comenzado a trabajar y se reúnen regularmente nuestros funcionarios con directores de museos en Alemania, pero todavía estamos muy lejos de la restitución, porque primero se deben tomar varios pasos”.
La cuestión de las restituciones alemanas a sus propias ex colonias, ha pasado desapercibida en los medios especializados, en contraposición a la mediática campaña alemana de restitución de los Bronces de Benín a Nigeria. En este sentido, la profesora Bénédicte Savoy observó que “Quizás era más fácil para Alemania centrarse primero en restituir los bronces de Benin a Nigeria porque, en ese caso, el saqueo violento fue perpetrado por tropas británicas, no alemanas. Enfrentarse y asumir los propios actos de brutalidad requiere más trabajo político y psicológico…”
Francia, Alemania, Gran Bretaña, Bélgica, han escrito por sí solas una verdadera Historia Negra, que no Leyenda del colonialismo. Las reivindicaciones cancelacionistas y del revisionismo histórico colonial están trabajando a fondo este filón ideológico, en el que se mezcla patrimonio, cultura y política.