REDACCIÓN. Según informa THE OBJECTIVE, recuerda que María Blasco fue despedida de su cargo como directora científica del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) el pasado 29 de enero. ¿El motivo?: Sobresueldos presuntamente indebidos, un contrato irregular, denuncias por abuso de poder y un polémico programa de arte con viajes alrededor del mundo CNIO-Arte que fue el origen de toda la polémica y, en consecuencia, el patronato del centro decidió paralizar las actividades ligadas al programa a través del cual se compraron obras de arte por casi un millón de euros.
El periodico asegura que el CNIO sigue pagando sueldos a personas que nada tienen que ver con la investigación, ya que los tres trabajadores contratados para este programa CNIA-Arte, siguen en nómina, sin haber sido suspendidos de empleo ni sueldo pese a no poder realizar ningún trabajo, ya que el programa está suspendido desde el 17 de diciembre. Como consecuencia, denuncian, que el centro sigue aumentando la cantidad «malversada», cuyo dinero no podrá dedicarse a investigar el cáncer.
De esta forma, el galerista Juan de Nieves y otras dos personas más (un ayudante y una trabajadora de comunicación) siguen en nómina con un programa suspendido hace más de un mes y medio. El coste anual de esas tres nóminas es de 200.000 euros: el sueldo del responsable de CNIO Arte asciende a unos 100.000 euros anuales. Juan de Nieves desempeña el cargo de director de la Oficina de Imagen Institucional del centro. Su perfil y trayectoria profesional , según el diario ABC no tienen relación alguna con las investigaciones científicas ni con los objetivos de lucha contra el cáncer establecidos en los estatutos del CNIO.
Tras el cese de María Blasco y Juan Arroyo, exgerente del CNIO, el patronato nombró al científico Fernando Peláez como director científico en funciones y otorgó la gestión administrativa y contable de forma interina a una comisión delegada.
No obstante las fuentes internas consultadas tienen grandes dudas sobre si esta nueva dirección en funciones actuará al respecto, ya que temen que quieran tomar decisiones de calado. La comisión delegada la forman la directora del Instituto de Salud Carlos III y vicepresidenta del patronato, María Pollán; el secretario del patronato y subdirector del ISCIII, Agustín González, el abogado del Estado -que no tiene voto- Fernando Arenas, el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, y la presidenta del CSIC, Ángela Nieto.
Pollán y González ya han rechazado ser los sustitutos de Arroyo, según ha podido saber este periódico. «Ambos se han negado rotundamente», indican las fuentes consultadas.
La situación es tan preocupante que el pasado día 31 «no había nadie» para firmar los proyectos del Programa Retos del Ministerio de Ciencia e Innovación. Fue Juan Arroyo quien finalmente los firmó, ya que aún no le había sido comunicado oficialmente su cese.
Ahora, Pollán ha emplazado al director científico en funciones, Fernando Peláez, para el próximo 10 de febrero e intentar pasar página de forma definitiva después de dos meses de escandalosas informaciones y 13 años de «despilfarro económico».