REDACCIÓN . Según informa RTVE, este mes de diciembre se estrenará la serie documental “El robo del Códice”. un manuscrito del S.XII, considerado la primera “guía para los peregrinos” y una joya de valor incalculable de nuestro Patrimonio Artístico Cultural .
La nueva serie de RTVE Play, que también podrá verse en La1 de RTVE, sigue la investigación policial del caso a lo largo de tres capítulos Desaparecido oficialmente el 5 de julio de 2011, tras meses de rocambolescos interrogatorios y justo un año después del robo, el 4 de julio de 2012, se encontró el Códice en un trastero propiedad de la familia de Castiñeiras. El famoso electricista de la catedral.
El robo del Códice pretende dar a conocer el frenético año que pasaron las autoridades eclesiásticas y policiales, pero también la importancia de la Catedral de Santiago en España, la del Camino de Santiago para el mundo entero y la de una obra, hasta entonces desconocida para la mayoría: el Códice Calixtino.
La investigación era una contrarreloj, el libro podía haber salido al extranjero y, a ojos de todo el mundo, de nada servía encontrar al autor si nunca se recuperaba la joya perdida.
El robo del Códice sólo era la punta del iceberg
Los hechos que se narran ponen de manifiesto el descontrol que había en una de las Catedrales más importantes del mundo: el templo recibe cada año a más de tres millones de visitantes venidos de todos los países. El millón de euros que recaudan, da una dimensión de todo lo que mueve la Catedral de Santiago. Es por eso que la policía se tomó el caso muy en serio, con una investigación a contrarreloj por encontrar una pieza de valor incalculable.
Sin embargo, lo que parecía un robo de guante blanco, con la posible implicación de narcotraficantes de varios países, acabó siendo obra de un electricista de 60 años que vivía a 6 kilómetros de distancia. A veces la explicación más sencilla es la más probable.
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Promoción de la serie aparte, el director de Pecados del Arte tuvo en su momento, la oportunidad de cotejar con varios expertos y profesionales del sector, las circunstancias de este robo y su resolución.
Más allá de lo raro del robo y dejar en evidencia las carencias de seguridad, surgieron cuestiones tales como el perfil y procedencia del comitente del robo y sobretodo que tipo de grupos criminales de arte estaban operando en España.
Algunos opinaban que este robo se solucionó de manera tan rápida precisamente por la repercusión mediática del caso ¿Quién querría o se atrevería a traficar o mercadear con una obra tan conocida?. En una presentación de su libro, el famoso Erik comentó en privado que “Sí yo hubiese robado el Códice el día 5, ese mismo día ya hubiera salido fuera de España, Eso sí, con gente especializada y no con narcos gallegos…” Lo que está claro, es que ya fuese de manera accidental o premeditada, el Códice Calixtino se convirtió en una pieza “maldita” que afortunadamente prefirió esconderse a moverla con agilidad y luego ya fue demasiado tarde para ello.
Según otros expertos, el tiempo corría en su contra y consideraban que si aquel robo fue un encargo, quien lo hizo prefirió perder el dinero que había entregado a cuenta. ¿Se sería acaso el millón de euros que encontraron en casa del electricista Castiñeiras para pagar su participación y la posible producción de copias del libro?.
Otra especialista indicó que si bien se pudo tratar de una red criminal y las más obvias serían las del narcotráfico, aunque su falta de “especialización” en objetos de arte y cuentas pendientes con la policía, podría haber facilitado la posibilidad de un “intercambio”. Es decir: Chivatazo a cambio de reducción de pena. Por poner sólo una posibilidad.
Estas y otras cuestiones quedaron en el más absoluto secretismo por parte de las autoridades para no variar la tónica habitual de desconfianza manifiesta y falta de empatía hacia otros profesionales del sector.
Lo que está claro, es que a este robo y su resolución se le dio prioridad de Estado ¿Tal vez porqué el Presidente del Gobierno de entonces era un gallego nacido en Santiago de Compostela?.