REDACCIÓN. La polémica sobre la autencidad de la pintura rusa de Vanguardias no cesa. Según informa ARTNEWS, la policía francesa habría recuperado casi 100 obras de las 900 robadas en 2019 al coleccionista palestino Uthman Khatib, que se conservaban en un deposito en Alemania.
Se da la circunstancia que En 2015, Khatib compró las 900 pinturas rusas a Itzhak Zarug, un marchante de arte israelí propietario de una galería en Wiesbaden, también el Alemania.
Para acabar de hacerlo bonito, Itzhak Zarug ya fue condenado en 2013 por estafa y falsificación de certificaciones y documentos de Provenance de este tipo de obras, un caso que no estuvo exento de polemica, ya que por aquel entonces la policía alemana investigó y requisó el fondo del israeli que contaba con 1.800 piezas. Finalmente y después de las investigaciones y espertizaciones que se llevaron a cabo entonces, sólo 19 obras de este marchante fueron declaradas falsas. Fue condenado a una pena leve de dos años y en 2019 se le devolvieron las obras requisadas.
Como decíamos, el coleccionista palestino, compró al israelí las 900 obras de las1800 incautadas en 2015, a pesar de estar bajo custodia policial y bajo sospecha de falsificación y cuando las autoridades las devolvieron en 2019, Itzhak Zarug pudo recuperarlas , pero el mismo año, las robaron del almacén donde estaban depositadas.
Algún colaborador maledicente de Pecados del Arte ha considerado que este robo fue muy oportuno: Robar obras de arte que teóricamente han sido condonadas de sospecha de falsedad, no significa que realmente no lo sean. Hay Expertos en Vanguardias rusas mucho mejores que los 10 que escogieron la policía alemana y tal vez una vez en el mercado puedan ser estudiadas en mejores condiciones. Es decir mejor hacer desaparecer el cuerpo del delito.
Este mismo redactor, supone que las obras robadas estaban aseguradas y si las autoridades las declararon originales, la empresa aseguradora deberá pagar igualmente la prima. Es decir que el robo de las obras habría sido rentable por doble vía.
La familia del coleccionista palestino Itzhak Zarug afirma, ya se han vendido muchas de estas obras en subastas en Israel, Mónaco y Francia. La familia afirma que las casas de subastas ignoraron las cartas de cese y desistimiento en las que se les informaba que las obras en cuestión probablemente habían sido robadas.
Es de suponer que tanto la policía alemana, como el marchante Zarug, como el coleccionista Khatib tendrían un archivo fotográfico de las obras robadas, por lo que se desconoce el motivo por el cual no se han revisado los catálogos de las subastas mencionadas.
De momento la familia Zarug afirma que las obras devueltas por la policia tienen un valor de 108 millones de euros. Una manera como otra de revalorizar unas obras que fueron falsas pero ahora no tanto...
El mercado del arte de vanguardia ruso es particularmente conocido por estar inundado de falsificaciones. En 2020, un par de coleccionistas fueron detenidos por prestar 24 obras falsas para una exposición de 2017 sobre el modernismo ruso en el Museo de Bellas Artes de Gante. Mientras un número creciente de exposiciones institucionales se veían arruinadas por el problema de las falsificaciones , el Museo Ludwig de Colonia organizó en 2020 una exposición que cuestionaba la autenticidad de las obras de su propia colección.
El asunto promete y nuestro colaborador maledicente, raras veces se equivoca, y todo apunta a un interesante acuerdo entre las partes (israelí y palestino), por lo que esperamos ofrecer más información en los próximos meses.