REDACCIÓN. Según informa el MINISTERIO DE CULTURA DE FRANCIA, dos cuadros de Auguste Renoir y Alfred Sisley han sido restituidos a los herederos del marchante de arte judío Grégoire Schusterman Los expertos franceses determinaron en noviembre de 2023 que la venta de las obras en 1941 habías sido forzadas por la ocupación nazi.
Las pinturas son las Cariátides de Renoir (1909), que se encuentran en el Museo Renoir de Cagnes-sur-Mer desde 1995, y las Barcazas de Sisley (1870), que se encuentra en el Museo de Dieppe en Normandía desde 1954.
Schusterman fue un judío ruso que abrió su galería en París en 1933. Cuando comenzó la ocupación nazi de Francia en junio de 1940. Los ocupantes empezaron a expropiar negocios judíos con el apoyo del gobierno de Vichy y Schusterman para escapar de esta persecución, huyó a Niza en marzo de 1941 y para financiar su fuga, se vio obligado a vender Renoir y Sisley. Aunque sobre el papel puedan parecer ventas normales, las autoridades francesas consideran que fue “una venta forzada, una venta bajo coerción, es en realidad una forma de expoliación”.
Poco después, ambas obras fueron vendidas por distintos intermediarios franceses a la marchante alemana Maria Gillhausen. Los registros de ambas ventas documentan incluso la participación del agregado cultural de la embajada alemana en París facilitando la transferencia de bienes culturales durante la ocupación alemana.
Después de la guerra las dos pinturas se encontraban entre las 61.000 obras de arte saqueadas que fueron devueltas a Francia y gestionadas por el Servicio de Recuperación de Museos Nacionales (MNR), creado en 1944 y que supervisó la devolución de alrededor de 45.000 bienes a sus propietarios de antes de la guerra. Más de 2.200 obras denominadas “MNR”, incluidas las pinturas de Renoir y Sisley, que “no fueron reclamadas” se exhibieron en museos nacionales hasta que se pudo identificar al propietario legítimo.
Aproximadamente en esta época, Schusterman hizo un intento fallido de recuperar las dos pinturas, según cartas de 1961 dirigidas a Valland y al Fondo Social Judío Unificado. Finalmente se sintió abrumado por la pesadez de los trámites administrativos y desistió.
En 2023 Francia reformó sus políticas de restitución con la aprobación de una ley específica que acelera el proceso de restitución de bienes culturales MNR de propiedad estatal que fueron despojados entre 1933 y 1945 y que al haber ingresado en colecciones nacionales, normalmente eran considerados inalienables por la ley francesa.
Gracias a esta reforma, los investigadores pudieron demostrar que Schusterman se había visto obligado a vender las pinturas de Renoir y Sisley, que se conservaban en los museos nacionales de Cagnes-sur-Mer y Dieppe. La financiación para la investigación de procedencia en Francia se ha duplicado en 2024, lo que permitirá que una mayor parte de este trabajo se realice en museos regionales.