¿En qué estarían pensando los del Vaticano cuando devolvieron sus mármoles del Partenón?

Hace días ya les advertía que cada inglés lleva dentro a un colonialista más rabioso que Disraeli, aquel ministro que tuvo la reina Victoria. Pero claro , tampoco hay que olvidar que no hay nada más británico y virulento, que un hindú-ingles de segunda generación cuya familia proceda de un país africano de la Commonwealth puteados por servir el gintonic de las seis y media a los ingleses.

Como a su predecesora Liz Truss (Lizzy la Breve) no le dio tiempo para pensar en el asunto, a este ya no le ha pillado el asunto con el paso cambiado y no se ha cortado un pelo: Los mármoles de Elgin (ojito que no dice “del Partenón”), no salen ni saldrán del British.

No sé el dineral que se habrán gastado los griegos este último año en comunicación, lobby y propaganda para esta quimera, mentirijillas incluidas, que aún los recuerdo de mis épocas zascandileando por Bruselas.

Aunque en mi opinión, la puntilla la dio el Papa en diciembre, entregando a Grecia los tres mármoles del Partenón que tenían en los Museos Vaticanos. A ver si con el gesto los ingleses se animaban. No sé a quien se le ocurrió la idea, si al Papa Bergoglio o a algún "cardenal asesor".

¿Acaso pretendían que un Papa Católico que para más coña y cuando era Arzobispo de Buenos Aires, celebraba misas por los héroes de la guerra las Malvinas diera lecciones a los ingleses? Yo no sé quien asesora en el Vaticano, pero más les valdría volver a la eficaz y delicada diplomacia florentina de antaño y dejarse de experimentos porteños de relaciones públicas ¡Menuda recontracagada, ché!…

¡¿Para qué me provocan a un inglés-hindú de segunda generación y conservador con una maniobra vaticana?! ¡¿Qué opciones tenía el pobre muchacho?!, Pues eso: Reafirmarse como británico, antipapista y pagano hindú. Y ya está.

No se imaginan lo mal que me sabe, porque pensaba que esta historieta de los mármoles todavía daría momentos de gloria divertimento y solaz, pero por otro lado, tampoco ya les quedaban muchas excusas a los ingleses, la verdad.

El asunto de los Mármoles del Partenón o los Mármoles de Elgin, se ha terminado. Imagino que dentro de unos años, ¡Dios me conserve, para poder verlo!, la volverán a liar.

Aquí los griegos me han fallado, la verdad. Con más de medio millón de griegos ingleses de tercera y cuarta generación en el país, parce mentira que no hallan sido capaces de preparar a un candidato conservador “durmiente”, en plan espía del KGB. Habrá que estar pendiente, por tanto, si en las filas del partido conservador milita alguno, tipo Irving Domenicopulos Sommerset o así, porque si no, me parece que los mármoles seguirán echando polvo en la salas 18a y 18b del British Museum.

Ahora bien, yo si fuera inglés tampoco iría a un restaurante griego en Londres a comer meliztanosalata en una temporada. Igualita, igualita en color, textura y pastosidad…