pecadosdelarte.com

Josep Mª Abad y Ribalta

España: La perdida patrimonial de las Armas Históricas

Pistola Isard, ejemplar de presentación al  President Lluis Companys y capturada por las tropas nacionales al entrar en Barcelona en Enero de 1939. Fabricada en los Tallers del Parc Mòbil,  Barcelona,
Ampliar
Pistola Isard, ejemplar de presentación al President Lluis Companys y capturada por las tropas nacionales al entrar en Barcelona en Enero de 1939. Fabricada en los Tallers del Parc Mòbil, Barcelona, (Foto: © Josep Mª Abad Ribalta)
domingo 25 de febrero de 2024, 10:00h
'Pistolas y Subfusiles de la República. Producción de Guerra'
Ampliar
"Pistolas y Subfusiles de la República. Producción de Guerra" (Foto: © J.M. Abad, M.Estirado, Fco.Fuentes)
Carta de Josep Mª Abad, reconocido experto, autor y coleccionista de armas histíoricas y cual es la alarmante situación en España de estos objetos históricos que también forman parte de nuestro Patrimonio Histórico Industrial.

En una conversación con el Sr. Marcel Salmans (responsable de coleccionismo de ANARMA y delegado de la FESAC: Foundation for European Societies of Arms Collectors) hablamos sobre el estado del mundo del coleccionismo de armas en España y me pidió que hiciera un escrito explicando mi punto de vista sobre la situación.

Primeramente me presentaré: Soy Josep Mª Abad Ribalta, Doctor en Medicina y Cirugía y cirujano de profesión. Casado y tengo dos hijos y tres nietos. Estoy en el mundo de las armas de fuego desde finales de los 80 cuando me hice socio del Club de Tir d’Igualada. Aparte de las armas de competición empecé a comprar armas históricas, inicialmente Astra con sus variedades hechas en la guerra civil y las alemanas P08 (Luger) y últimamente armas de fuego hechas por la Industria de Guerra de Catalunya y por la Subsecretaria de Armamento.

He escrito junto a Manuel Estirado y Francisco Fuentes el libro: "Pistolas y Subfusiles de la República. Producción de Guerra". Una obra de gran formato en DIN A4 y 580 páginas. En este libro se describe el papel de la Industria de Guerra de Catalunya (IGC) encabezada por el Molt Honorable Josep Tarradellas y Joan d'Esquerra Republicana de Catalunya en la fabricación de armamento y munición. Y del papel posterior de la Subsecretaría de Armamento que no despertó hasta finales de 1.937 y que finalmente fagocitó a la IGC provocando la incorporación a filas de los empleados jóvenes, modificando las tareas de las fábricas y la consiguiente bajada en picado de la producción.

Para hacer este libro visitamos a muchos coleccionistas, todos temerosos de que el valor histórico y patrimonial de sus colecciones quedaría en nada con su muerte. Con las leyes actuales con mucha suerte estas armas pasarán al Banco Oficial de Pruebas donde quedarán soldadas de forma que nunca se podrá estudiar su funcionamiento o con menos suerte pasarán a ser chatarra.

Es una pérdida patrimonial tanto para el país como para los propietarios. Para el país porque una parte de su historia como es la producción de armas de fuego tanto en tiempo de paz como en tiempo de guerra quedará achatarrada o soldada de forma que su estudio posterior será imposible y para los propietarios porque estas armas perderán gran parte de su valor.

Por otro lado, los museos tienen grandes problemas para tener armas de fuego en sus colecciones. Viví en primera mano el intento de compra de un subfusil Olot Fontbernat y un Labora en estado de tiro semiautomático (con el mecanismo de ráfagas desactivado y toda la documentación en regla) por parte del Museo de Historia de Cataluña y fue absolutamente imposible con todo tipo de impedimentos para parte de la Guardia Civil. Si en un museo de historia no se puede tener una vitrina sobre el papel de la Industria de Guerra de Catalunya en el marco del conflicto bélico de la Guerra Civil puede que vayamos apagando las luces y vayamos saliendo.

Una Industria que fabricó el subfusil Olot-Fontbernat en Olot, el subfusil Labora en los talleres Labora Metal en el barrio de Sants en Barcelona, el subfusil David-Schmeisser en los Talleres David de la calle Aribau, la pistola Francisco Ascaso en Terrassa y la pistola Isard en los Talleres del Parque Móvil en Gràcia. Una producción de armas que probablemente no cambió el curso de la guerra, pero que en un tiempo record cambió la producción de los talleres, la formación de operarios especializados y la introducción de la mujer en el mundo del trabajo. Todo esto no puede quedar reflejado con las armas y municiones que se produjeron por unas leyes absurdas que impiden su preservación.

Afortunadamente en los años 60 un gran cargamento de armas de fuego fue a Estados Unidos, allí que conocen el valor de dichas armas las conservan gracias a leyes que favorecen al coleccionismo. Los primeros modelos de la pistola Isard están en Estados Unidos y gracias a ello pudimos ponerlos en el libro para que quedara una constancia gráfica de su evolución. En España sólo hay segundos modelos, en poca cantidad y con un futuro incierto.

ANARMA y asociaciones europeas como la FESAC valoran la creación de la licencia de coleccionista que permita tener armas de fuego consideradas históricas, evitando su destrucción para preservar el patrimonio industrial del país.

España es una anomalía dentro de Europa ya que la mayoría de países han trabajado en este aspecto y nosotros hemos cogido lo peor de la ley sin ofrecer contrapartidas.

Tenemos el libro de coleccionista pero desde la entrada de la nueva ley ya no se pueden inscribir armas históricas en él y se tienen que guiar si se quieren conservar intactas, con una licencia de Tiro Olímpico con las limitaciones en el cupo de armas que tenemos.

En la presentación de nuestro libro pude hablar con el Sr. Petroni presidente de la FESAC (https://fesac.eu) que aparte de quedar impresionado por el libro quedó totalmente horrorizado por la situación del coleccionismo de armas de fuego en nuestro país. Es necesario modificar una ley absurda sobre la posesión de armas de fuego históricas, que es la vergüenza de las asociaciones europeas, y favorecer su tenencia y el cambio de propietario en caso de fallecimiento.

Dr. Josep Mª Abad y Ribalta

Pistola CNT/FAI posteriormente denominada Francisco Ascaso para no herir susceptibilidades, fabricada al Taller Confederal Nº1 de Terrassa que pasó a llamarse Fábrica 200 tras ser incautada por la Subsecretaria de Armamento.
Ampliar
Pistola CNT/FAI posteriormente denominada Francisco Ascaso para no herir susceptibilidades, fabricada al Taller Confederal Nº1 de Terrassa que pasó a llamarse Fábrica 200 tras ser incautada por la Subsecretaria de Armamento. (Foto: © Josep Mª Abad Ribalta)
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
8 comentarios