Expolio arqueológico

De momento, más de 40 objetos robados de Italia, Grecia y Turquía vendidos o cedidos a museos y colecciones han sido identificados por ARCA como procedentes de Michael L. Ward

Los delitos contra el Patrimonio Histórico están castigados en el Código Penal con la pena de prisión de seis meses a tres años o multa de doce a veinticuatro meses y, en cuanto a las infracciones administrativas, se enfrentan a infracciones muy graves con sanciones hasta 600.000 euros.

Se ha detenido al propietario del museo y presidente del patronato de la fundación, como presunto responsable de delitos contra el patrimonio histórico, receptación y sustracción de cosa propia a su utilidad social o cultural

Han aparecido numerosas pintadas y grafitos en paredes y techos, la valla perimetral de la cueva está rota y se han realizado catas clandestinas para desenterrar posibles restos arqueológicos.

El uso de detectores de metales con el fin de materiales arqueológicos sin la correspondiente autorización está prohibido y puede acarrear multas de hasta 150.000€

Ante un hallazgo casual de un bien arqueológico es obligatorio paralizar su actuación y comunicarlo inmediatamente a la Dirección General competente en materia de Patrimonio y Bienes Culturales.

Entre los objetos incautados hay 11 monedas, 3 botones, 2 insignias y un “As” del I a.C acuñado Clunia Sulpicia (Burgos)

Las autoridades también recuperaron herramientas de excavación como detectores de metales y documentación de transacciones falsas en Italia y en el extranjero

Ha sido acusado de receptación y multado con 3.360 ?. Podría haber sido condenado a 25 meses de prisión.

Por un lado los combates en la capital, están desplazando a refugiados hacia la zona, por otro, el expolio de restos y la destrucción de los murales descubiertos sin protección de ningún tipo son un riesgo inminente.

No está claro cuándo se expolió la estatua, aunque ya estaba en los Estados Unidos en 1968

Un reciente informe de investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) ha puesto patas arriba las controvertidas colecciones del MET, provocando en las últimas semanas una autentica sangría en cuestión de reclamaciones y restituciones.

Se confirma que el procedimiento de “préstamos y donaciones temporales al museo” como práctica habitual de blanqueo de piezas expoliadas y traficadas ilegalmente al mercado americano.