REDACCIÓN. El pasado 22 de septiembre, el diario THE GUARDIAN revelaba que la colección de arte del oligarca Roman Abramovich, habría conseguido evitar las incautaciones ordenadas por las sanciones a los empresarios rusos que han apoyado la política de la invasión de Ucrania.
Así, la OCCRP (Proyecto de Informes sobre Crimen Organizado y Corrupción)y gracias a la filtración de documentos de la consultora MeritServus HC Limited, de servicios Offshore con sede en Chipre, ha desvelado que no sólo la colección de arte ha quedado blindada , sino que se desconoce actualmente su ubicación física.
Quizás el aspecto más evidente de los informes, es el hecho que en febrero de 2022, pocos días después de que las autoridades del Reino Unido advirtieran a los oligarcas rusos con vínculos con Putin y el Kremlin que una invasión de Ucrania podría provocar sanciones, la consultora de Chipre que custodiaba la colección de arte de Abramovich, reestructuró la participación y propiedad de la colección para reducir la participación y titularidad del oligarca por debajo del umbral “crucial” del 50%, ya que Abramovich , habría puesto a nombre de su ex esposa Dasha Zhukova el 51% la titularidad de más de 300 obras de arte valoras en más de 963 millones de dólares.
Abramovich y Zhukova se divorciaron en 2017.
Según las normas de la UE, el Reino Unido y los Estados Unidos, cualquier activo que pertenezca en un 50% por ciento a una persona sancionada puede congelarse. En este caso y teniendo en cuenta la hábil maniobra del ruso, esta exento de esta sanción, puesto que “sólo” posee el 49%.
Durante los nueve años de matrimonio de la pareja, Abramovich y Zhukova se ganaron una reputación como coleccionistas serios y exquisitos, acumulando una colección de más de 300 obras de arte de las firmas más importantes y cotizadas como Piet Mondrian, Henri Matisse, Edgar Degas, Amedeo Modigliani, Francis Bacon, Paula Rego y Anselm Kiefer. La colección también destaca por modernistas rusos como Natalia Goncharova y Véra Rockline. Una pieza de este periodo a destacar es una composición Suprematista de Kazimir Malevich.
El informe de The Guardian también explica cómo Abramovich y Zhukova construyeron su enorme colección de arte gracias al al asesor de arte Sandford Heller, y el uso de almacenes propiedad del especialista británico llamado Martinspeed, Los documentos analizados por The Guardian mostraron que docenas de obras de la colección de Abramovich, algunas de ellas valoradas en millones, “fueron importadas y exportadas internacionalmente, por aire y camión, a través de Ginebra, Moscú, Nueva York y Lieja”.
Martinsspeed fue adquirido Croizer Fine Arts en 2021. Obviamente hace falta preguntarse quien es realmente el o los propietarios de esta empresa que no es otra que la propietaria de almacenes específicos para arte, con sedes en Estados Unidos, Asia y Suiza.
A principios de este año, el gobierno ucraniano lanzó una base de datos de arte propiedad de oligarcas rusos objeto de incautación. Sin embargo, la base de datos sólo incluía cuatro trabajos relacionados con Abramovich, una pequeña fracción de lo que se reveló a través de la filtración de documentos de MeritServus.
OCCRP y The Guardian ha revelado detalles de cómo MeritServus parecía haber seguido trabajando para Abramovich incluso después de la invasión de Ucrania. La empresa Offshore chipriota ha sido sancionada por el gobierno del Reino Unido en abril de 2023 después de que se publicaran informes en los medios sobre su trabajo con Abramovich y otros oligarcas.
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